Cordón umbilical, ¿tienes miedo a que tu bebé venga con alguna vuelta de cordón umbilical alrededor del cuello? Es muy común que durante el embarazo se tenga miedo a esta situación. Debes saber que esta es una situación que vemos de forma habitual en la sala de partos, se calcula que ocurre en un 20% de los nacimientos, y que acompañando el parto y el expulsivo de forma adecuada no tiene por qué haber ningún problema. Un parto bien asistido y cuidado puede ser una experiencia hermosa e inolvidable.

Cuidar del cordón umbilical es una parte importante de garantizar una transición saludable al mundo exterior para el bebé.

El cordón umbilical en el nacimiento

Y el rechazar o retirar la vuelta de cordón que rodea alguna parte del cuerpo de nuestro bebé no es una técnica complicada ni que suponga ningún riesgo, esa algo común y que estamos habituados a hacerlo.

Es importante saber que los controles ecográficos que se os realizan durante el embarazo nos garantizan que el aporte sanguíneo a los órganos fundamentales está asegurado y este aporte se realiza a través del cordón umbilical. Durante el parto realizamos este control a través de la monitorización fetal.

Estas dos pruebas son nuestro control de seguridad, cómo el cordón se coloque o relacione con el bebé es algo circunstancial y anecdótico, pero no condiciona su bienestar, si estas dos pruebas son tranquilizadoras.

¿Qué es el cordón umbilical?

El cordón umbilical es la conexión vital entre el bebé y la madre durante el embarazo. A través de este, el bebé recibe los nutrientes y el oxígeno necesarios para crecer y desarrollarse adecuadamente, y elimina los productos de deshecho.

Se trata de una estructura flexible y alargada formada por dos arterias y una vena, envueltas por una sustancia gelatinosa llamada gelatina de Wharton, que lo protege y lo mantiene flexible. Durante el embarazo, el cordón umbilical se encuentra en el centro del abdomen del feto y se extiende hasta la placenta, donde se conecta a la circulación sanguínea de la madre.

Tras el nacimiento, el cordón umbilical se corta para separar al bebé de la placenta y se sella con una pinza especial, es lo que se conoce como clampaje. La cicatriz que queda en el abdomen del recién nacido es el ombligo, que debe curarse durante los primeros días del recién nacido y acaba convirtiéndose en una cicatriz permanente.

El clampaje tardío de cordón

Tras el nacimiento, y si ninguna emergencia lo impide, es recomendable esperar a que el cordón umbilical deje de latir, entre 1 y 3 minutos, en vez de cortarlo inmediatamente. 

El clampaje tardío de cordón permite que el bebé reciba más sangre rica en hierro y nutrientes de la placenta, esencial para el desarrollo del recién nacido.

Y en general excepto situaciones marcadas y que se explican en el momento del nacimiento es la práctica que se recomienda.

Beneficios

• Mejora de los niveles de hierro en los seis primeros meses de vida
• Mejora de la función respiratoria
• Menor riesgo de hemorragia intraventricular en bebés prematuros
• Favorece una mejor transición y adaptación a la vida extrauterina

Posibles complicaciones en el parto

Los problemas con el cordón umbilical durante el parto se pueden detectar a través de la monitorización fetal, que registra la frecuencia cardíaca del feto y las contracciones uterinas de la madre. En función de la evolución del parto, se decidirán las acciones posteriores que serán explicadas y compartidas.

La comunicación y la confianza con tu equipo profesional es esencial para vivir tu embarazo de forma tranquila y saludable, elige un equipo que te acompañe y dé respuestas a tus dudas e inquietudes.

Si tienes dudas sobre la vuelta de cordón alrededor del cuello del bebé, compártelas y trataremos de resolverlas, ¡seguro que ayudan a muchas mamás!